La práctica de deportes de montaña tiene, tanto en la actualidad como tradicionalmente, un marcado carácter no competitivo. La práctica de la actividad física tiene beneficios para la salud individual y pública, genera progreso socio-económico en entornos rurales y es, a su vez, un espacio de formación, socialización y captación de futuros deportistas.
El senderismo es el deporte no competitivo más practicado según la encuesta de hábitos deportivos 2022 (Ministerio de Cultura y Deporte)
El área de deporte no competitivo tiene como finalidad el ayudar al entramado federativo y a las personas montañeras a mejorar y promover la práctica de nuestros deportes con unos objetivos claros de seguridad y respeto al medio natural. El futuro de nuestros deportes y la mejora de la calidad de vida de nuestra sociedad pasa, sin duda, por avanzar en el fomento de un acceso al medio natural libre, igualitario, seguro y respetuoso con el entorno.