Continuamos con la serie de entrevistas que nos acercarán a la labor internacional realizada desde la FEDME. Un trabajo que permite formar parte de foros y federaciones internacionales donde se debaten y toman decisiones que afectan directa o indirectamente a nuestros federados y federadas.
Conversamos con Iñigo Ayllon, vicepresidente deportivo de la FEDME, que nos aporta una visión más concreta del impacto internacional que tienen nuestros deportes de competición y su participación proyectos desde los que está impulsando este área de la FEDME.
Representas a la Federación Española y por tanto al Montañismo español a nivel internacional, ¿qué significa esto para ti?
Un orgullo y una responsabilidad. Demostrar que tenemos el conocimiento y la capacidad para estar trabajando al más alto nivel con una federación olímpica y que representas el trabajo y conocimiento de mucha gente que ha estado antes que yo aportando, compitiendo, organizando…
¿Qué trayectoria has seguido en el deporte o tu vida profesional o federativa para que la FEDME te haya seleccionado/a como experto de referencia nacional?
Desde 2013 he colaborado con FEDME en diversos aspectos gracias a mi formación jurídica. En 2015, cuando se crea el Comité de Seguridad empiezo a meterme de forma más asidua en el día a día federativo (al igual que he colaborado con prácticamente todas las FFAA), y en especial en los aspectos de accidentalidad y responsabilidad.
¿Desde cuándo representas a la FEDME, cómo has llegado hasta la Federación Internacional?
Desde 2022 estoy en este Comité de la ISMF de cara a su puesta a punto para Milano Cortina 2026, es una federación todavía muy joven y necesita de mucho trabajo en diversas áreas. La propuesta inicial parte de Jordi Canals, Secretario General de ISMF, y tras una reunión la presidenta Regula Meier y la creación del grupo de trabajo fui elegido por unanimidad. Me consta que Oriol Montero, representante de los árbitros en ISMF, también apoyo mi nombramiento.
¿Cómo se trabaja en una comisión de expertos de deporte a nivel internacional? ¿Qué tipo de miembros hay en tu Comisión?
El trabajo es básicamente online, y participamos gente de diversas federaciones nacionales y algún deportista. Tenemos una misión clara respecto a la seguridad de las competiciones, pero también actuamos cuando se nos reclama en el día a día (política respecto a deportistas transgénero, reforma de estatutos…)
¿Qué se espera de ti o de la FEDME?
Aportar experiencia y conocimiento. El presente olímpico implica una enorme responsabilidad para esta federación si queremos conseguir que todo funcione como debe y se establezca en esa posición de privilegio. La FEDME es una de las grandes federaciones europeas (y por tanto mundiales) a nivel deportivo pero también organizativo. Saben de nuestra seriedad y eso se valora mucho.
¿Cuál es tu función en esa posición?
Me toca realizar un papel de dirección y coordinación y también ser la cara visible de este comité ante los órganos directivos de ISMF y otras federaciones. Además, trabajamos conjuntamente con el Responsable deportivo de ISMF.
¿Piensas que es importante que la FEDME contribuya a este esfuerzo internacional?, ¿Por qué?
Aquí podría decirte que hay dos visiones diferentes y que conviven. Lo primero es aportar para que esta Federación sea lo más seria y profesional posible ante su estreno olímpico. La otra visión, es que estando ahí, disponemos de más información y conocimiento que aplicar en FEDME y de la que nuestras y nuestros deportistas se pueden beneficiar.
¿Piensas que la FEDME es valorada a nivel internacional?
Me consta que si. A nivel europeo, latinoamericano y mundial. Somos un referente para muchas federaciones.
Estás en una posición única para ver el deporte desde una perspectiva más amplia y global, ¿Qué opinas del presente y el futuro de los deportes de montaña?
Todo el montañismo mundial comparte problemas y cada vez tenemos una “clientela” más global y con intereses similares, por tanto creo que las soluciones deberían ser similares en muchos casos. A nivel estrictamente deportivo, la irrupción en el programa olímpico va a marcar una brecha muy importante entre unos y otros deportes y debe ser una puerta de entrada a una nueva realidad.
El futuro tiene retos muy complejos (cambio climático, masificación, regulación de espacios para la conservación ambiental…) que debemos afrontar con unión y conocimiento compartido.
El boom del acceso a la naturaleza hay que gestionarlo y aprovecharlo, no solo verlo como algo negativo o una oportunidad de negocio rápida.