Fotos: © fotografiadeaccionchechu

Las calles de Benasque se convierten en los bloques de la primera prueba oficial de escalada urbana que se organiza en España en el centenario de la Federación Española. Una primera prueba que ha contado con sesenta escaladores.

Las muros frontales del ayuntamiento o de la tienda de Barrabés han sido alguno de los escenarios nada naturales de una competición peculiar y novedosa de street bouldering. Una iniciativa con la que sacar la escalada a la calle, acercando una disciplina olímpica en la que España lograba el oro olímpico de la mano de Alberto Ginés.

Seis vías trazadas por route setting teniendo en cuenta características técnicas de los diversos edificios del casco urbano de Benasque. Piedras de caliza o granito con agarres cercanos a lo que se puede encontrar en la montaña, adaptándose a la arquitectura urbana, utilizando barandillas, columnas o arcos… Buscando un grado inicial de dificultad se fijaba en 5+ para facilitar el acceso a la competición a distintos niveles de experiencia y no hacer una cita exclusiva para especialistas de élite, con la única condición de tener más de catorce años. Un circuito que l@s escalador@s debían que completar en grupos y con un límite de treinta minutos por puesto.

Las calles y plazas de Benasque se llenaron de público para seguir la destreza de los sesenta participantes ascendiendo por los edificios mas representativos de esta bella localidad del Pirinéo.

La Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME) impulsaba esta cita deportiva junto a la colaboración con el Ayuntamiento de Benasque y B3Sportaiment, que esperan dar continuidad en el futuro.

Entre los edificios emblemáticos de Benasque utilizados en la competición, modernos y antiguos pero todos ellos en pleno casco urbano, figuraron el de Barrabés, cuatro edificios en Avenida de los Tilos, el Ayuntamiento, una travesía del Palacio de los Condes de Ribagorza, la iglesia de Santa María la Mayor o la plaza Llausia, donde se disputó una de las finales.

Por la mañana, tenían lugar las clasificatorias que daban acceso a las finales que se disputaban al finalizar la tarde, previo del sorteo de regalos cedidos por marcas de material específico como arneses, pies de gato, termos, cremas, limas, etcétera. A la caía de la tarde con la oscuridad de la noche, comenzaban las finales femeninas con nueve chicas finalistas siguiendo las vías a la luz de los frontales. Una novedad que aportó más dificultad y vistosidad”, comentaron desde la organización. A continuación, se daba paso a las finales masculinas.

Elisabeth Toré Mittendorfer, se proclamaba vencedora de esta primera prueba ocupando el primer puesto en esta Copa Centenario FEDME. Jennay Cervantes Torrentera y Lorena Alloza Zamoz, que empataron en el segundo puesto, completaron el podio femenino. En la categoría masculina, vencia Pablo Borderías, seguido por Miguel Plans Tena y Jorge Sánchez Serrano, que ocupaba la tercera posición en el podio.

Una competición para disfrutar, muy visual y cercana. Diversión tanto para los escaladores como para el público congregado disfrutando los ascensos por las fachadas de este enclave tan bello.

Valoración muy positiva de un evento que quiere tener continuidad gracias al buen ambiente y la presencia de público con la intención de diseñar un circuito que esta temporada continuará en Potes el próximo 7 de octubre.

Fotografía de la galería: © fotografiadeaccionchechu